Fotografía: Ángel Hernández Segura |
MUJER, TÚ
Prendido
sigue algún fuego en el margen
del camino
angosto que ellos andan.
Sin embargo
es- pese a todo- pilar de su firmeza
la mirada
convergente en el norte de sus ojos.
Mujer,
tú...enredas en el viento tus
sentidos,
escondes
tras las velas sentimientos
y
rugen con las olas ansias desmedidas,
corazones
que a deshoras se enamoran
a
golpes de timón y madrugadas de brisa.
Aparejas
tu barco, marinera a destiempo,
curtidas
las manos en el quehacer diario
de
la casa y de los hijos y apuntas el rumbo
dirá
Dios adónde, porque ni tú lo sabes,
careciendo
en tu viaje de mapa y sextante.
Convertirás
el movimiento en escritura suave,
conocerás
en tu fatiga compañeros de ruta,
descubrirás
que existen maravillas diferentes,
que
no es igual el sonido de la lluvia cuando cae
de
esas nubes que no son blancas ni grises.
Sobre
las aguas conversarás con la luna
distinta
a cuando asomaba a tu ventana,
sin
que nadie ose interrumpir tal instante.
Verás que
algunos somos necesaria oscuridad,
obligado
contraste de unas pocas estrellas brillantes.