Fotografía: Ángel Hernández Segura |
Es fácil pensar en ti. Basta con abrir los ojos y mirar a cualquier parte;
calles, playas, mar y rocas guardan como tesoro valioso el aire que respiramos.
Es fácil pensar en ti. Basta con cerrar los ojos y todo es imaginarte;
se queda el tiempo parado en el temblor de tus miedos y me recorren tus manos.
Es fácil pensar en ti. Ni un solo rincón de mi cuerpo pudo jamás olvidarte.
Puntos suspensivos, pausa y un paréntesis abraza el punto en que nos quedamos.
Es fácil pensar en ti. Ha quedado en mí tu rastro y no cesé de buscarte;
quedó un hombre enamorado condenado para siempre, preso de un sabor de labios.
Es fácil pensar en ti. En la brújula que me legaste, el norte apunta a tu calle,
Llevantina sigue azul y el sol de tarde revive paseos de largos abrazos.
Es fácil pensar en ti… Es imposible no amarte.
Ángel Hernández Segura